Entre lo que existe y lo que no
He estado en casa, y de viaje.
En la playa y en el aire.
En jardines y calles.
He estado con el atardecer y la luna. El amanecer y su adios. Hasta luego, qué menos.
He estado con quien apareció, y con quien siempre estuvo.
Hablé mudo, pero equivoqué los ojos.
También de charla de equipaje. Buena charla, buen paisaje.
He estado arriba y abajo. Con mapa y sin brújula. Entre un corazón sagrado y una plaza de capuchinos. Entre lo que existe y lo que no.
He estado mirando y pensando, oyendo y creyendo, sintiendo y callando.
Pero sobre todo, he estado discutiendo. Conmigo mismo.
**