17 mayo, 2009

Están



Los que no están, están empero. Cayeron como vamos a caer en nuestra noche. La leve eternidad ya los protege. Quedaron sus palabras, escritas o escuchadas, sus gestos de alegría, sus odas de amargura. Sus manos que aún dialogan a veces con mis manos.
El cielo que ellos vieron me está viendo, celeste. El mundo nos rodea, con ellos y sin ellos. Faltaron en el júbilo, cuando todos lloramos. Faltaron en la pena, cuando todos cantamos.
Si percibo en mi espalda algún abrazo, pienso que pueden ser. Pero no son. Están empero.
Quisiera introducirme en sus ausencias y preguntarles todo: qué se llevaron, qué dejaron. No es bueno convivir con el vacío.
El pasado, colmado de rostros, nos castiga y nos premia. Reparte sus consejos, sus reproches. La memoria los junta. Y algo que vale: los que se fueron vuelven en los sueños. Bienvenidos.


- Mario Benedetti -
1920 - 2009





La poesía es el género en el que un escritor
interviene más con su propia vida.
Los otros géneros son de ficción,
la poesía no.





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16 mayo, 2009

Laurel





Pienso escribirte




Y tanto


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15 mayo, 2009

Volver, a toda la fortuna, de mi corazón





Yo adivino el parpadeo
de las luces que a lo lejos
van marcando mi retorno.

Son las mismas que alumbraron
con sus pálidos reflejos
hondas horas de dolor.

Y aunque no quise el regreso
siempre se vuelve
al primer amor.

La quieta calle
que en el eco dijo
tuya es su vida
tuyo es su querer.

Bajo el burlón
mirar de las estrellas
que con indiferencia
hoy me ven volver.

Volver
con la frente marchita
las nieves del tiempo
platearon mi sien.

Sentir
que es un soplo la vida
que veinte años no es nada
que febril la mirada
errante en las sombras
te busca y te nombra.

Vivir
con el alma aferrada
a un dulce recuerdo
que lloro otra vez.

Tengo miedo del encuentro
con el pasado que vuelve
a enfrentarse con mi vida.

Tengo miedo de las noches
que pobladas de recuerdos
encadenan mi soñar.

Pero el viajero que huye
tarde o temprano
detiene su andar.

Y aunque el olvido
que todo destruye
haya matado mi vieja ilusión,

tengo escondida
una esperanza humilde
que es toda la fortuna
de mi corazón.

Volver
con la frente marchita
las nieves del tiempo
platearon mi sien.

Sentir
que es un soplo la vida
que veinte años no es nada
que febril la mirada
errante en las sombras
te busca y te nombra.

Vivir
con el alma aferrada
a un dulce recuerdo
que lloro otra vez.




- Carlos Gardel -
(Andrés Calamaro)



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