23 agosto, 2007

Siete


Allá en el principio de Julio:


- Yo a Manilva voy seguro

- Al final es en Torrox

- Bueno, pues a Torrox

- Seguramente nosotras vayamos. ¿Para el alojamiento contamos contigo?

- Contad conmigo


No sé si considerarme un fichaje o fruto de una casualidad imprevisible e inevitable. Cierto es que el destino y yo hemos jugado juntos algunas cartas, pero busquemos alojamiento en estas líneas para lo que entre nosotros sí se ha compartido.

No exageraría (o sí, pero me da igual), si digo que podría haberos identificado como la mismísima arena de mi playa. Personalizando, sois viernes, sábado y domingo (mi fin de semana).

Junto a estas tres PERSONAS, y todas aquellas que arrimaron al cobijo de su falda para un verano de chiringuito (ya habéis sido nombradas en respectivos blogs), se han recorrido kilómetros y kilómetros de risas y sonrisas. Y no cansa.

No cansa porque en ese cuentakilómetros no ha habido lugar para "un mosqueo, ni malentendido, ni nada malo", ni atención a gorrillas de camping o sucedaneos rebeldes.


Antesdeayer estaba dándole un codazo a Lago. Ayer me hacíais entrega de una chapa de A3metros (¿eso es cerca o lejos?) y hoy nos encontramos rebobinando una cinta con fotos y comentarios que 7 fines de semana, traducidos a 7 letras, han dejado grabadas.

Allá por finales de Mayo, sumando a Aristóteles con Chaplin, terminamos aventurando que íbamos a pasar un verano memorable. Simplemente porque nos lo merecíamos (me apunto un email a Laguito). Y cuando las expectativas no sólo se cumplen, sino que se superan, la sensación es sensible.


¿El mejor verano de mi vida? No sé cómo se mide eso. En todos ocurrieron sorpresas, viajes, amig@s ... pero sí, si hubiese escrito el guión de estos 2 meses (qué suerte que ambos tengan 31 días y no 30 ó 28), no los hubiera dibujado con tanto color.

¿Cómo se mide un verano, una amistad, una alegría o un compartir? Seguramente estudiando la desnudez de un alma o los latidos de un corazón.


Hace un año, contaba a quien por entonces me escuchaba, que llevaba 3 meses que me sentía como la caja que guarda todos los sentimientos posibles, más desordenados que otra cosa. En Noviembre decía que eran 6 meses porque seguíamos sumando fechas que llenaban tanto la vida como el calendario. En Marzo 10 y hoy puedo escribir que llevo 15 meses revolviendo esa caja, buscando una llave que abriese el candado que faltaba y que al fin a Noe di. Una amiga por la que daría tanto como lo que contenía la historia que le conté.

Pensando ahora en ella os digo, que no hay nada como ver sonreir a un amigo. Así que imaginad con cuánto me habéis pagado este verano.


Aparte podemos dejar frases que pasarán a la historia de nuestros blogs, y algunas que me hicieron ser una sonrisa andante. "El día que a Javi le dé por contar de nosotras..." lo traduzco en confianza. Que cojáis un teléfono para contar dónde vais a tomaros un bocadillo de dos cuartas denota que hizo ilusión..., que te pidan permiso para acercarse a no sé quién, una voz recien despertada o que después de 9 años entrenando alguien te sorprenda con un "mister" fuera de la pista... Mil payasadas de Albarra (me apunto post de payasos con dedicatoria), tanto convivir con Mar...

Y aún me queda pensar que no os conozco lo suficiente, y que eso solamente sugiere que todavía queda por ver. Seguro que casi todo bueno.


Y antes de terminar, aunque detrás vendrán muchos posts relacionados, voy a dejar escrito algo que yo sí vi, y DISFRUTÉ.

Si de balonmano playa hablamos, después de haber estado en Cádiz, Torrox, Lepe, Sevilla, Tarifa, Cullera y Chiclana, los primeros 5 minutos del segundo set que jugásteis con la Selección Española (precedidos por el gol del verano), han sido los mejores del balonmano playa femenino en España este año.


7 fines de semana después puedo volver a decir:


Contad conmigo, y siempre, con mi amistad


Quien tiene un amigo, tiene dos vidas.

Quien tiene dos amigos, tiene tres vidas.

Y así sigue.

**

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hace ya una semana que esa foto descansa materializada en mi escritorio, y no es para menos.

Apenas he conocido otros nombres este verano, y volvería a elegir el mismo camino otra vez, con vosotros. Sin pensármelo.

A tí decirte que pasaste de ser algo que, pensábamos, era totalmente circunstancial... a convertirte en el 9º jugador de nuestro equipo. Los preparativos, el kilometraje, e incluso el viaje en sí habrían dejado de ser lo mismo si tú no hubieras estado allí con nosotras para verlo, sentirlo y vivirlo. Hay que agradecerte un sinfín de gestos, comentarios salvadores, sonrisas, ideas e incluso carcajadas que más de una vez han sido de más ayuda de la que has llegado a imaginar.

Estoy en esa foto, al lado de dos de las mejores compañeras que he tenido fuera y dentro de la pista, y a mi izquierda queda la mejor persona con la que he tenido la suerte de tropezar en estos últimos años.

No os cambio, por nada.

¿Y sabéis lo mejor? Que esto no se acaba aquí.

Javi** dijo...

Sigo viendo que esto no acaba. Que aunque al sol le cueste un poco menos que antes irse a otro meridiano, estamos en verano.

Y no porque así lo dicte una fecha, sino porque aún llegan mensajes a las 5 de la mañana, o se planean escapadas endiabladas.

Sobre lo que hemos escrito hasta ahora... pues que me siento no sabes de qué manera al ver lo que se ha compartido, lo que se ha dicho, escrito, recordado... incluso lo que se ha callado, je je je.

Y que no acabe nunca ;)