28 mayo, 2008

Lecciones


Lo que se aprende en la madurez, no son cosas sencillas, tales como adquirir habilidades e información. Se aprende a no incurrir en conductas autodestructivas, a no dilapidar energía por causa de la ansiedad. Se descubre cómo dominar las tensiones y que el resentimiento y la autocompasión se encuentran entre las drogas más tóxicas. Se aprende que el mundo adora el talento pero recompensa la personalidad. Se comprende que la mayoría de la gente no está a nuestro favor ni en contra, sino que está absorta en sí misma. Se aprende, en fin, que por grande que sea nuestro empeño por agradar a los demás siempre habrá personas que no nos quieran. Esto es una dura lección al principio, pero al final resulta tranquilizadora.




Sunderland P. Gardner

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2 comentarios:

Unknown dijo...

hola, me encanta la frase, tiene una fuerza y lucidez impresionanate, te agradeceria que me dijeras en que libro lo encontraste, me harias un favor . me llamo raquel y mi correo es adarachel@hotmail.com,

te lo agradezco de antemano

Javi** dijo...

Gracias por tu comentario. Te dejo un correo. Saludos, y felices fiestas.