Un buen verano

Este verano ha tenido días y noches, lunas y soles, victorias y derrotas, kilometros y sueños. Y sueño. Sonrisas y triunfos, personas nuevas, personas de siempre, recuerdos y lágrimas. Colchones de a cuatro y buena compañía. Y la sonrisa de un cuatro con el orgullo de otro. Y ganas, muchas ganas.


En Málaga, Córdoba, Barcelona, Alicante, Cádiz, Nerja-Torrox, Fuengirola. Y París. París.


Ha tenido el viaje al corazón de un alguien. Cosas del 2008 y cosas del 2007. Más canciones. Más charlas y más aprender. Llamadas inesperadas. Un mundial en casa y unos juegos olímpicos personales y particulares. Y un premio que me guardo para otro día. Y ganas, muchas ganas.


De chasquear los dedos, guardar lo disfrutado y seguir viviendo.
De tener unos días de templaza en ese septiembre con mi propio 'luego', el mío de olivos, silencio y sonrisas que desarman. Y recuperar una parte importante del Javi que mejor conozco.


Conciertos. Grandes conciertos. Callejones y vueltas a casa.

De donde más cuesta volver es de donde duele.

24 horas siguen siendo lo que tenemos al cabo del día, y me gasto unas en escuchar de cerca un organillo.
Des-ilusiones y Des-canso.
Promesas bajo llave. Segundos platos, y lo que no viene en el menú.


Sin duda, ha sido un buen verano.
Un buen verano.

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