18 octubre, 2007

Un brindis



Al final te suele quedar claro quién sí.
Quién se agrada, quién brinda por ti
y con el mejor de sus cristales.



En una el alma; en la otra, el corazón

**

1 comentario:

BeRiTa dijo...

No tiene mucho que empece a afcionarme al vino... curiosamente el día en que una ilusión antes de morir, me rompió.

ese día brindé con una amiga por un miedo superado...

vino tinto, por cierto, es el que prefiero...

Saludos!